El tatuaje es un elemento de decoración corporal, sin embargo, cada año aumenta el número de pacientes que acuden a centros para realizar una eliminación láser de un tatuaje, ya sea por motivos profesionales o personales. Antiguamente, los tatuajes se eliminaban con métodos agresivos de abrasión o ablación. En la actualidad se emplean técnicas basadas en la tecnología láser para eliminarlos.
Una de las causas más frecuentes por la que un individuo solicita realizar una eliminación láser de un tatuaje es debido a que se encuentran presentes en zonas visibles, como manos, brazos o cuello, interfieriendo en la vida laboral de la persona, de tal manera que pueden provocar que no puedan acceder a profesiones reguladas de carácter institucional con atención al público, como es el caso de policía nacional o guardia civil. Otra de las razones más habituales que conllevan a realizar una eliminación láser de un tatuaje, es debido a la necesidad de situar otro tatuaje de mejores características estéticas, por lo que se requiere una eliminación parcial del mismo. Este proceso denominado “cover láser tattoo” es muy frecuente en los estudios de tatuaje, donde se está experimentando un auge de las eliminaciones, puesto que los requerimientos académicos para efectuar una despigmentación láser son reducidos, ya que con un diploma acreditativo de formación y la titulación higiénico sanitaria es suficiente para desarrollar esta labor.
Hace años la eliminación láser de un tatuaje se realizaba mediante técnicas traumáticas de carácter invasivo, basadas en la electrocoagulación o la dermoabrasión, donde se producía una extirpación del tejido micropigmentado lo que conllevaba a la aparición de cicatrices con la forma del tatuaje. En la actualidad, la eliminación láser de un tatuaje se aborda mediante la técnica láser, que permite despigmentar los tatuajes de una forma progresiva, sin agredir la piel. El éxito del borrado de un tatuaje, depende de varios factores como son el color, el tipo del tatuaje, su localización, el tipo de máquina empleada, el tipo de piel, etc.
En la actualidad existen multitud de maquinarias que permiten físicamente realizar la eliminación láser de un tatuaje, pero si es cierto que lo más habitual es realizarlo con láseres Q-Switch Nd-YAG que combina las longitudes de onda de 1064nm y 532nm lo que permite eliminar la gran mayoría de pigmentos. El haz del rayo láser emitido actúa fragmentando las partículas de pigmento en partículas de tamaño mucho más reducido, permitiendo así que nuestro organismo reabsorba estas sustancias y las elimine posteriormente a través del drenaje linfático.
En la Escuela Del Tatuaje disponemos como oferta formativa del curso oficial de eliminación de tatuajes por láser, donde aprenderás todo lo necesario para poder aplicar despigmentación sin riesgo para el cliente.
Mucho más que un escuela…